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Al parecer el lugar en donde vivmos tiene menos importancia que un torneo de foot ball. Al parecer, la selva, eñl desierto. los polos, las llanuras, las estepas, los ios, los inmensos mares y la naturaleza, simplemente no importan. El protocolo de Kioto se recuerdxa a veces y los ambientalistas por mas que dijeron no fueron escuchados.
Al parecer lo inevitable ocurrira. La especie humana - es decir el homo sapiens sapiens- sucumbira ante la destruccion de su casa . La contaminacion y la destruccion del habitat es ya imparable y la apatia de los gobiernos y de los ciudadanos cavan nuetsra propia tumba.
El homo videns, consumista , egoista y comodo olvida la escencia de su vida. La tortuga en a playa. El temash calli. El ritual que nos recuerda nuestra madre tierra se esconde tras las comodidades y la falta de ciudado de nuestro entorno. El interes comercial sepulta las miles de opciones tecnologias para detener el cvonsumo de hidrocarburos y la produccion de asfixiantes humos que acaban con la atmosfera y el agua pura que necesita la vida como la conocemos, se consume poco a poco.
Llueve acidamente en las ciudades. La vida se asfixia y solo observamos hasta que ya nada podamos hacer mas que sucumbir.
Anexo:
En Bolivia, Perú y la Argentina, aún hoy se le rinde culto a la Pachamama, antigua deidad inca que representa a la madre tierra y posee grandes poderes...
La Pachamama será quien proteja la cosecha y los animales. Y a ella se le da gracias por lo concedido, se le ofrece lo obtenido de ella y se le pide por el futuro. Todo esto transcurre en un contexto de gran júbilo. Cada habitante pondrá lo mejor de sí, sus mejores ropas, su mejor ganado, su más fina cosecha para engalanar a la Pachamama. De las palabras que se brindan a la Pacha encontramos este texto; "Pachamama, santa tierra, santa tierra, hoy es tu día. Como no te he de ofrendar chicha y coca por la buena parición que me has dado".
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